El cantautor comenzó su trayectoria musical desde muy pequeño. Su madre también cantaba todos los fines de semana hasta el último de sus días, por lo que Héctor “Titín” Molina,  siempre tuvo esa inspiración.

Cuando comenzó, su motivación principal fueron los coros. Aquí conoció a compositores fundamentales en lo que es él como artista actualmente. Gustavo Arriagada fue uno de ellos, quien creaba las canciones de José Alfredo Fuentes, Jaime Atria y Nano Acevedo. Fue así como a sus 17 años lo dejaron como solista del coro de la enseñanza media de su colegio. Esto, lo llevó a ganar en la Feria del Mundo Joven y en un montón de festivales escolares, donde el más importante era el del liceo Andacollo. Héctor tenía un talento que lo llevó rápidamente a ser conocido.

El cantautor es licenciado en Filosofía, junto con un doctorado en la Universidad de Salamanca. Además, realizó un diplomado en culturas y lenguas, un Máster en historia de México y un magíster. Dentro de su etapa de educación superior, Héctor siguió participando en eventos musicales, donde ganó el festival nacional universitario. Respecto a esto, el artista comenta que “Hoy hacen falta festivales en las escuelas para seguir descubriendo talentos jóvenes”. Fue así, como en los años 80, Titín Molina tuvo la gran oportunidad de presentarse en el Festival de Viña del Mar, junto a un equipo musical de más de 50 artistas que venían de Broadway, Estados Unidos. “Postulamos más de 200 chilenos y gané. Me acompañó Patricia Meza, quien falleció. Era una gran orquesta dirigida por Juan Arzúa. Yo tenía veinte años en ese momento y llegué a la final gracias a los aplausos, fue un año muy potente”. El artista considera que esta experiencia fue algo bastante interesante y que le dio la posibilidad de conocer a diversos artistas de la época. Además, fue señalado como una de las figuras de la década de los ochenta por el diario El Mercurio.

Respecto a su proceso creativo, Héctor Molina comenta que para él, tiene que ver con la capacidad de impresión. Es decir, todo ser humano se impresiona, por lo que hay un artista en cada persona. “Me acordé de Huidobro cuando dice que el artista es un pequeño Dios, porque puede crear. Lo que pasa es que algunos nos dedicamos a esto con mayor profesionalismo, dedicación, amor. Algunos con más o menos talento, siempre van haber artistas mejores y peores que uno, esa es la realidad de todas las cosas de la vida”, menciona el cantautor. En relación con la música actualmente, “Titín” Molina, considera que hay que prepararnos para la crisis que estamos viviendo actualmente, ya que esto, ha acelerado el proceso de respuesta cultural. Menciona que, en el caso de la música, se deberán acostumbrar a grabar a distancia y alfabetizarse digitalmente.